Continuando lo abordado la semana pasada vamos a hablar ahora de los toros. Ya tratamos la selección de vaquillonas por área pélvica, y ahora debemos elegir el padre, esto es clave, no tenemos otra opción que “guiarnos” por la información que tengamos de éste.
La “información” va desde un; “quédate tranquilo que el padre daba chico”, genómica, y DEPS. El ordenamiento fue de menor a mayor precisión.
Para el primer caso, debemos decir que no siempre un hijo de un toro de bajo peso al nacer heredara esta característica, hay que tener en cuenta la consistencia genética, para este dato, del establecimiento donde adquirimos el toro. Si lleva años seleccionando su rodeo para bajo peso tendremos un panorama más claro comparado con otro que no tiene datos.
Para sacarnos la duda tenemos la Genómica, con todos los defectos que pueda tener esta herramienta, es mejor tener información que no tener nada.
Por esos los DEPS son la mejor fuente de datos que tenemos para elegir un toro: facilidad de parto (FP), peso al nacer (PN) y largo de gestación (LG), debemos también observar la Precisión y el Ranking.
Peso al nacer: aproximadamente el 80% de las dificultades al parto en vaquillonas está relacionado con el PN. Este, está relacionado con las características genéticas del padre y por supuesto también de la madre, los factores ambientales tienen poca influencia en este dato, un toro que da un determinado PN seguirá dando ese determinado peso al nacer por más que restrinjamos la alimentación de la madre en el último tercio de gestación, lo mismo pasa si tenemos una vaquillona que proviene de un rodeo de tamaño “grande”, esta tiene tendencia a dar un ternero de alto PN.
Largo de gestación: el largo de gestación está relacionado con el tamaño/PN del ternero, gestaciones cortas da un ternero más chico, la mayoría de los toros de “facilidad de parto” tienen gestaciones más cortas, abusar de este dato nos dará terneros muy débiles que les costará pararse y poder mamar.
Facilidad de parto: expresa qué % de partos sin ayuda puede tener eses toro por encima o por debajo del promedio. Un toro que tenga 10% de FP nos está indicando que tendrá, en 100 partos, 10 más sin ayuda que el promedio de la raza.
% de precisión: valores cercanos a 1 o 100, depende como se exprese, nos hablan de un toro más “medido”, que ha tenido más descendencia, ´por lo tanto tiene más consistencia genética para ese dato.
Ranking: expresa en que percentil está el reproductor para un determinado Deps. Cuanto más bajo el valor del ranking, nos indica que pertenece un % pequeño de la población para el dato observado, dicho de otra manera, nos dice que hay “pocos” toros con tan buen dato.
También demos tener en cuenta otras características genéticas que tienen correlación negativa, al mejorar esta, empeoramos otra:
Tamaño Adulto: Si no prestamos atención a este dato, “agrandaremos” el rodeo, animales grandes dan terneros más pesados al nacer.
Tasa de crecimiento (Peso al destete (PD) y al año (PF): estos datos están relacionados con un incremento de tamaño en todas las edades, incluido el PN.
Frame score: por cada punto de incremento, la altura adulta crecerá aproximadamente 4 cm y el peso final 35 kg, aumentando el tamaño del rodeo.
Ver además: Que el parto de las vaquillonas no termine en una pesadilla
Por eso los toros que se llaman “rompedores de curvas” son buscados y más costoso, esto combinan, como ser, BAJO PN, ALTO PD Y PF, manteniendo una altura madura 0 o negativa.
Cuando encontramos un toro que nos funciones, NO debemos cambiarlo, sobre todo si tiene buenos datos en los otros parámetros productivos, otra alternativa al tener que cambiar un toro padre para vaquillonas, cuando realizamos IATF, es inseminar una mitad con un toro y la otra con otro, para disminuir la probabilidad de tener problemas con un solo toro.
Y a pesar de todos esto, y de utilizar todas las herramientas que tenemos a disposición, igual podemos tener problemas, y a veces es difícil encontrar una respuesta, se ha mencionado la nutrición antes del parto, y otras causas, pero la verdad que en rodeos con una línea genética determinada, siguiendo un objetivo, los problemas son menores o “casi” inexistentes, he tenido en la práctica problemas con vaquillonas, de mayor o menor magnitud y lo importante es no darse por vencido y descartar una técnica que da excelente resultados y nos ayuda a ser más eficientes.
Med. Vet. Waldino Catellucci especial para CAMPO total
MP 11429 – wcastellucci@hotmail.com – TE: 2923-690796