Haciendo uso de las facultades que le confiere el reglamento interno del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, su presidenta, Jimena López -funcionaria cercana al gobernador Kicillof- le otorgó un permiso de uso por el término de un año a Terminal Quequén, en las mismas condiciones en las que se encuentra hoy, según lo informó el ente portuario. Y puso por ahora en pausa la polémica generada a partir de la intención de la Provincia de reservarse un cupo del tonelaje operado en el nuevo contrato, algo que generó un fuerte rechazo de todo el arco productivo.
“De este modo, se garantiza la continuidad de la operatoria portuaria en los sitios 4,5 y 6 por el término de un año, además de las condiciones laborales de las cien familias que se nutren de las actividades que ahí se desarrollan”, indicó el ente un comunicado.
“Vale aclarar que se considera al término de un año más que prudencial para el tratamiento del pliego y la licitación nacional e internacional que por ley se debe cumplir”, agrega el escrito.
Justamente el tratamiento del pliego fue el que desencadenó una fuerte polémica hace un par de meses cuando los integrantes del directorio del Consorcio se enteraron que incluía en su articulado uno que indicaba que la Provincia se reservaba un 30% del volumen de granos operado por el elevador. El directorio del Consorcio le hizo saber a la presidenta que no iba a ser aprobado ese requerimiento y la funcionaria finalmente determinó la prórroga por un año.
Así, la titular del ente portuario, en conferencia de prensa, indicó que “el mandato del gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, es licitar pensando en la transparencia y la certidumbre para el sector de la agroexportación”.
Además, precisó que “se ha ofrecido la posibilidad de un estudio de abogados de renombre con expertise en licitaciones internacionales sea quien evalúe, evitando así cualquier sospecha de sesgo de que el pliego pueda estar direccionado”.
En ese sentido, sumó que “esa propuesta va a ser elevada al directorio para que sean ellos quienes elijan el estudio jurídico”, ya que “no es facultad de esta presidencia elegir cual será, pero sí que haya alguien externo para que evalúe los alcances de esa licitación”.
Finalmente reforzó la idea de que “el eje de la transparencia está dado por una licitación en donde todos los oferentes puedan competir libremente que es una estructura que el sector demanda hace muchos años”.
Más polémica
Si bien la prórroga fue la salida más rápida y posibilita que la Terminal continuara en funcionamiento, la decisión fue tomada en soledad por la presidenta y por un período de un año, contra los 24 meses que proponía el directorio y que iba a exponer en la reunión que finalmente nunca se realizó porque la presidenta no la convocó.
“Desde el directorio habíamos pedido una reunión para tratar la prórroga, pero finalmente no se dio y después la presidenta sacó el comunicado indicando que prorrogaba por un año el permiso de operatorio de la Terminal”, explicó Juan Ouwerkerk, integrante del directorio como representante de Coninagro.
“Se proponía que la prórroga fuese de dos años para poder realizar un proceso transparente para la concesión futura”, agregó.
A partir de ahora vamos a trabajar junto al resto de los directores intensamente en el pliego que va a ser tratado, pero siempre con los condicionamientos que poníamos desde el principio, de no aceptar cosas que no corresponden, como este porcentaje que quería la Provincia para sí. Y también había otro punto que decía que un porcentaje del pago inicial del próximo oferente iría destinado a la municipalidad de Necochea. Ninguna de las dos cosas tienen sentido”, completó Ouwerkerk.
La concesión está en manos de Terminal Quequén SA, desde hace 30 años, y el 30 de noviembre vencía la última de las tres prórrogas anuales. Dicha firma es una empresa constituida por entidades de productores, corredores, el Centro de Acopiadores de Quequén, la Cámara Arbitral de Cereales, Matba Rofex, Bolsa de Cereales de Buenos Aires y exportadores (Viterra, Bunge, Cofco y Crucija).
Presiones
Se adivina que no será sencillo el tratamiento del nuevo pliego y que habrá una fuerte puja entre la Provincia y el directorio del Consorcio. Lejos está el gobernador Kicillof de bajarse de su idea de controlar un 30% del volumen operado por el elevador, cuestión que hoy no sería aprobada con la composición actual del directorio.
De hecho, ya fue removido Juan Franco Mancinelli, quien lo integraba como representante del Centro de Navegación Argentina, y habría presiones sobre otros dos integrantes con el objetivo de poder asegurarse que se cumplan los deseos de Kicillof. En los próximos meses se sabrá. (LVP)
Continuará….