Durante la 4° Jornada de la Mesa de las Carnes, una treintena de oradores hizo una puesta a punto de los temas en agenda desde el inicio: aumento de la productividad, control de reglas de la competencia, mejora de la calidad institucional y del acceso a mercados e incremento del empleo formal. Valor Carne preparó una síntesis con algunos de los aspectos salientes que hacen a la competitividad del sector.
Al inicio del encuentro, que reunió a más de 500 asistentes, los Coordinadores técnicos de la Mesa, Víctor Tonelli y Fernando Canosa, explicaron cómo creció la producción del conjunto de carnes, las exportaciones y la oferta al mercado interno, pese a que en los últimos 30 meses el precio de los productos pecuarios ajustó sólo al 40% de la evolución del tipo de cambio.
En cuanto a la agenda de la Mesa, destacaron los progresos en el control de la informalidad que permitieron transparentar el proceso hasta la salida de la carne de la planta frigorífica, restando aún abordar el desafío del comercio minorista. Sobre este punto, señalaron que se ha logrado un acuerdo con los organismos involucrados para achicar las alícuotas de Ingresos Brutos (IIBB), desarrollar el remito electrónico y crear el registro de carniceros, que dará impulso a su formalización, temática en la que se esperan avances significativos a fines de este año.
Hecho entre todos
Marcelo Rossi, Director Nacional de Control Comercial Agropecuario y uno de los actores relevantes de los cambios realizados, presentó un esclarecedor video de cómo funcionan los controladores electrónicos de faena, mediante balanzas y cámaras de video, que cubren el 98% del procesamiento del país. Mencionó asimismo que en agosto se contará con una central de monitorio, financiada por el IPCVA, que permitirá profundizar estas acciones.
Por su parte, Rodrigo Troncoso, Subsecretario de Ganadería del Minagro, tras destacar la interacción entre la Mesa de las Carnes y el Gobierno, se refirió al trabajo conjunto que se está haciendo con el Ministerio de la Producción de Buenos Aires. La iniciativa busca alcanzar un estándar sanitario básico similar en frigoríficos con habilitación nacional y en mataderos provinciales y municipales. Como primeros resultados, de las 39 plantas de la provincia que no estaban controladas por SENASA, 22 ya fueron inspeccionadas, encontrándose que sólo 7 estaban en condiciones, 10 fueron cerradas y reabiertas tras corregir los errores y 5 fueron clausuradas. Afirmó que antes de fin de año el 100% de las unidades estarán bajo control.
El funcionario finalizó mencionando que se está desarrollando un tablero de control integral, en el que el Minagro, Senasa, AFIP, ARBA, AGIP, el Ministerio de Trabajo y las provincias que adhieran confluirán aportando y utilizando la misma información, lo que permitirá realizar controles exhaustivos para mejorar la transparencia.
Removiendo obstáculos
Entre los temas de agenda pendientes, los Coordinadores plantearon que el Gobierno debería instrumentar el ajuste por inflación para no seguir pagando impuestos sobre ganancias irreales, uno de los puntos que genera mayor inequidad en las actividades ganaderas y que está vigente desde hace 26 años.
La opinión de Santiago Saénz Valiente, reconocido especialista en cuestiones impositivas, fue contundente: “no permitir el ajuste por inflación estimula la evasión”. La problemática, con una inflación que desde el inicio de este Gobierno lleva acumulada el 92%, termina por desalentar esquemas ganaderos con recrías, por ejemplo, que demandan más de un ejercicio, y cuya carga impositiva excede largamente la tasa de rentabilidad propia del negocio. Este tema, clave para la producción, ha sido planteado en las reuniones que sostuvo la Mesa con el Presidente de la República y se espera que sea corregido a la brevedad. La propuesta es que se autorice ese ajuste, sincerando índices de inflación, y utilizando valuaciones por kilo de cabeza de ganado similares al final y al inicio del ejercicio.
Otro desafío es eliminar las distorsiones generadas a partir del tránsito federal, con tasa e impuestos inadecuados, que actúan como verdaderas aduanas internas. Al respecto, David Miazzo, de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), afirmó que la carga impositiva total sobre la carne al consumidor alcanza al 24,5%, de los cuales los tributos nacionales significan el 67%, los provinciales el 28% y los municipales el 5%. En concreto, cuando se compra un kilo de carne al mostrador, de cada cuatro pesos pagados uno va directamente al Estado.
En cuanto al posicionamiento de la ganadería argentina en el mundo, la presentación de Eduardo Serantes, del Grupo de Países Productores del Sur, fue disruptiva ya que brindó herramientas para paliar el posible uso de las emisiones de gases de efecto invernadero como nuevas barreras comerciales. Basándose en trabajos del científico Ernesto Viglizzo, demostró que los países desarrollados, aluden a las emisiones de la ganadería pero, pocas veces y con cierta intencionalidad, evitan mencionar los efectos positivos del secuestro de carbono de las tierras en pastoreo, básicamente a través de la fotosíntesis. Los vacunos emiten 1,5 toneladas equivalente de dióxido de carbono (CO2) por cabeza/año, en tanto que el secuestro de una hectárea promedio agropecuaria deja un balance positivo equivalente a 1,2 toneladas de CO2 por año, permitiendo neutralizar incluso las emisiones de gases de los sectores no rurales. Conclusiones impactantes, que permiten definir a la Argentina como país de carbono neutro y que deberían ser tomadas como bandera en foros internacionales.
Una cuestión que también limita la expansión de la ganadería es la infraestructura. Guillermo Dietrich, Ministro de Transporte, señaló que la logística doméstica en la Argentina es más cara que en los países vecinos y esto representa una descompetencia para la exportación de carne. Por caso, el costo por tonelada y por kilómetro para una distancia de 300 km es de 11,3 (centavo de dólar) para la Argentina y 8,2 para Brasil. Seguidamente, presentó ejemplos de las obras en marcha: 356 km de autopistas finalizadas y 1.326 km en ejecución, detallando que una autopista reduce un 20% los costos de logística. Además, hay más de 5.000 km de rutas con nuevas pavimentaciones o repavimentaciones y casi 15.000 km en ejecución, a lo que se suma la aprobación de los llamados bitrenes que, con mayores cargas por unidad, generarán ahorros de 25 al 35% en transporte. Por último, se refirió a las mayores facilidades para las cargas aéreas de carnes, que en Aerolíneas Argentinas se incrementaron 92% desde comienzos de 2016.
Respecto del financiamiento, Javier González Fraga, presidente del Banco de la Nación Argentina, destacó el apoyo de la entidad a la ganadería, sector al que se otorgaron más de 20.000 créditos en los últimos 18 meses. Recordó la vigencia de préstamos para compra o retención de ganado de cría o recría con garantía en la propia hacienda y el apoyo al Mercado de Futuros para operaciones de invernada y gordos, que contribuyen a la fluidez de las operaciones. Por último, sugirió que los ganaderos analicen la toma de créditos en dólares, con tasas muy razonables frente a las opciones en pesos que, al momento, resultan una fuerte limitación para los procesos productivos. Asimismo, exhortó a los frigoríficos exportadores a hacer contratos en dólares que, a su vez, podrían contar con coberturas en la misma moneda.
En lo que hace a la visión de la industria, Martín Constantini, directivo de ABC y de Frigorífico Rioplatense proyectó que, en base a las mejoras de la competitividad esperadas, las exportaciones podrán crecer a 1,2 millones de toneladas para 2025, incrementando el ingreso de divisas en U$S 3.500 millones y la recaudación de impuestos en U$S 1.300 millones, con la creación de 40.000 puestos de trabajo directos e indirectos.
Redondeando las ponencias, David Lacroze, Coordinador General de la Mesa, explicó que los avances que se están logrando en la cadena se basan en propuestas concretas, acordadas mediante el diálogo, la confianza y el consenso de un grupo heterogéneo de 28 entidades del sector. Bajo el lema “Juntos somos más”, resaltó la consistencia de un modelo de construcción de capital social sin precedentes en la ganadería argentina.
Por Liliana Rosenstein, Editora de Valor Carne
La mesa de las carnes rindió cuentas
Un grupo de especialistas analizó los avances en la agenda planteada hace más de tres años y detalló las medidas en carpeta para seguir adelante. Aunque falta mucho por hacer se ha podido aumentar la producción, la exportación y el consumo a la vez.