Impuesto a los gases bovinos. El campo cruzó a la diputada de Unión por la Patria Lucía Klug, que responde a Juan Grabois, por impulsar un proyecto para cobrar a los gases emitidos por los animales en el campo.
Los bovinos generan gases de efecto invernadero a lo largo del proceso de cría, principalmente metano. Por este motivo, Klug presentó la Tasa Ambiental sobre el Metano en Buenos Aires (Tamba) para mitigar la emisión de gas metano y hacer factible a largo plazo su actividad económica.
“La creación de un fondo fiduciario, tal como se establece en esta ley, busca compensar el metano emitido por la ganadería con la reducción de este mismo gas se logra mediante una gestión adecuada de los residuos sólidos urbanos”, indicó el proyecto.
Las entidades rurales no tardaron en contestarle. Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) respondió: “Que una diputada impulse cobrar un impuesto por los gases que emiten las vacas no es una discusión ambiental: es otra muestra de la capacidad de daño de dirigentes que, lejos de comprender cómo se produce en Argentina, vuelven a atacar al sector que sostiene al país”.
Por su parte, Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) contestó: “Cobrar por respirar a las vacas no reduce emisiones, reduce producción”. Y agregó que esta medida es seguir esquilmando al que produce.
El proyecto de ley argumenta que la tasa surge de la necesidad de enfrentar los desafíos del cambio climático y sus efectos. “Según el Inventario de GEI de la Argentina, la provincia de Buenos Aires es una de las principales emisoras, generando un cuarto del total de GEl del país, impulsado por su densidad poblacional y desarrollo productivo. Del total de emisiones provinciales, el 27% corresponde a metano (CH4), siendo las actividades ganaderas (19% de las emisiones de CH4 provinciales) y la gestión de residuos sólidos urbanos (6% de las emisiones de CH4 provinciales) dos de las fuentes más relevantes. En particular, la ganadería genera metano por fermentación entérica y manejo de estiércol, mientras que los rellenos sanitarios y basurales a cielo abierto son focos importantes de emisión de este gas”, dice el proyecto.
En este sentido, la diputada explicó que son sujetos obligados de la presente ley las entidades legalmente responsables de las empresas del sector ganadero asentadas en la provincia de Buenos Aires.
El detalle de la norma establece que se medirá y aplicará en función de los kilogramos de co2e (Dióxido de Carbono Equivalente) emitidos en la producción de cada establecimiento.
“Desde CRA necesitamos —y exigimos— dirigentes que trabajen a favor de la producción, no quienes creen ocurrencias desconectadas de la realidad del campo y de la ciencia. Si estas son las ideas que algunos proponen para ‘impulsar’ el sector, queda claro el tipo de liderazgo con el que pretenden que construyamos futuro”, apuntó la entidad. (Agrofy)
En una nube de «gases»
Una diputada kirchnerista quiere imponer un impuesto a los gases de los bovinos y hubo fuerte rechazo del campo. Se trata de una tasa sobre el metano para mitigar la emisión; entidades rurales aseguran que genera menos producción en lugar de mitigar la emisión



















