Para el mercado de granos nacional, la preocupación está en el trigo que también a nivel mundial presenta problemas por malas cosechas. Así lo explica Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, en su informe semanal.
“El trigo vive una paradoja: La mala cosecha rusa llevó a que el gobierno de ese país disponga aranceles crecientes y precios de exportación que irán subiendo mes a mes hasta diciembre. Por ello, los exportadores rusos aceleran sus ventas antes de que los impuestos suban y, de esta forma, un elemento alcista termina causando bajas de corto plazo”, comienza explicando Romano.
Desde nuestro país la situación del trigo también preocupante: Mientras la trilla está iniciando con 8% trillado, las ventas siguen estancadas en 11% de la producción. “Los precios en la zona de 220 no tentaron a los productores, y ante la coyuntura descriptiva de Rusia se complica la colocación de trigo argentino. Todo ello, junto con la necesidad de venta para cubrir necesidades financieras a fin de año, más la logística, podría causar bajas adicionales”, detalla el especialista.
La comercialización de trigo en Argentina avanzó marginalmente. “Estamos con 2,1 mill.tt. a precio, 11% de la producción proyectada. Normalmente estamos por encima de 28%”, recuerda Romano.
Con respecto al clima, las lluvias se normalizan y se instala en los meteorólogos proyecciones de niña débil, que tranquilizan a los productores. “Si bien las precipitaciones llegaron algo tarde para el maíz temprano y en zona núcleo vemos atrasos con la ventana de siembra de maíz cerrándose, la implantación sigue en momentos donde normalmente entra en el bache entre temprano y tardío. Las expectativas de menor presencia de chicharrita y una mejora en la rentabilidad esperada hace pensar en una apuesta mayor a la esperada”, analiza.
Las buenas noticias llegan desde el lado de la soja. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires publicó el primer avance en siembra de soja argentina: 3,3%, lo que significa un “leve adelanto” respecto al promedio. “La comercialización de soja 23/24 tuvo una buena semana, llevando el total comprado a precio a 25,2 mill.tt. o 50%. Si bien el ritmo es bueno, el acumulado debería llegar a 58% a esta altura del año”, indica Romano.
Por otro lado, la mejora en el aceite de soja FOB argentino se compensó con bajas en la harina, haciendo que la capacidad de pago se mantuviera estable. “La cola de buques muestra una cantidad récord de barcos esperando carga de aceite, contra muy pocos de harina. Esto podría generar problemas con la logística”, estima el profesor de la Universidad Austral.
Por otro lado, la comercialización de soja 24/25 sigue sin avanzar. “Sólo hay 210.000 tt operadas, menos del 1% cuando a esta altura deberíamos estar en casi 4%”, manifestó.
El Trigo, entre algodones
Asó lo explicó en su informe semanal Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.