Tuvieron que pasar casi 30 años en Dorrego para que una casa local, realizara un remate feria. La espera no fue en vano, sin dudas la fiesta de los 25 años de la firma Daniel Civardi, estuvo más que a la altura de los años esperados, completando el total de la feria en ocupación y una masiva concurrencia que se acercó hasta las instalaciones de la Sociedad Rural para decirle presente, a un gran amigo y cliente de muchos de los que se llegaron hasta el predio.
Una mañana elegida en lo climático para encontrar a todos los operadores de gordo de la región y alguno más, venido desde lejos para hacerle honor a un muy buen conjunto de vaquillonas que abrieron la subasta y encontraron muy buenos promedios, al igual que novillos y vacas embretadas.
La emblemática apertura de la invernada, rompió el fuego con un lote de colorados excepcionales y las muchas manos que dijeron presentes, hicieron del remate muy ágil, con buenos valores y el ritmo que Juanjo Ercazti le fue imprimiendo. La ternera con la consabida diferencia, marcó el rumbo hasta los vientres vacíos que se fueron de dos martillazos, para un plato bien fuerte en unas vacas MAS, traídas como “gala” de esta fiesta, haciéndole justicia en los valores.
Un remate cargado de emociones, sensaciones y de afecto, ese que se cosecha con acciones, con confianza y con respeto. Indudablemente el resultado de un equipo de trabajo que encabeza su titular pero que se extiende en cada uno de sus colaboradores a imagen y semejanza.
Una mañana que será recordada por Dorrego, donde muchos quizás saboreen la sensación de que este no será, el único remate de la firma.
Gentileza: Carlos Bodanza
